
Foto @polpuertas
IGC Força Lleida 88 – Zunder Palencia 81
Era un partido sumamente importante para ambos equipos, un partido para mantener las opciones de ventaja de campo en playoffs para Lleida y para Zunder Palencia, para seguir optando al ascenso directo, y así se reflejó en el ambiente en una cancha tan complicada y caliente como el Barris Nord, y así se reflejó en el aspecto de táctico y mental en los banquillos.

Y es que el partido tuvo tres partes diferenciadas; un primer cuarto dominado por los locales, un segundo cuarto dominado por Zunder Palencia, un tercer cuarto más o menos igualado con ventaja palentina, y un último cuarto marcado por la expulsión premeditada de un Gerard Encuentra que sabe como y cuando protestar hasta acabar expulsado y crear esa presión que desgraciadamente los colegiados no saben entender; no cabe lugar a dudas que Encuentra es el entrenador más expulsado de los encuentros en las dos últimas temporadas, sobretodo en su cancha, donde sabe que provoca más daño colateral, y lo infausto, es que los colegiados, por desconocimiento de la competición o de los contendientes, no sepan valorar estas situaciones. Buen conocimiento de Encuentra de cómo es el nivel arbitral, malo el poco conocimiento de ese mismo nivel del arbitraje.
El partido comenzaba dominado por un Força Lleida tocado por la varita mágica desde la línea de tres, unos primeros minutos en los que a pesar de ir perdiendo hasta por siete puntos, los de Rivero no le perdían de cara el encuentro y mordían cuando se presentaba la ocasión y no dejaban que se escaparan el marcador a pesar del alto porcentaje en el tiro exterior.

Al final del primer cuarto se reflejaba un 29 a 23 fruto de una prostera y cuestionable antideportiva de German Martinez, que era parcialmente aprovechada por los de Encuentra.
En el segundo cuarto la dinámica variaba, mientras en el primer cuarto Lleida abrumaba con su porcentaje de tiro de tres, ahora era el conjunto palentino el que sometía desde el 6’75 a los locales, aunque el rebote defensivo de los palentinos permitía demasiadas segundas opciones a los locales.
A falta de tres y medio para el descanso Palencia se ponía al frente en el marcador, y ampliaría su ventaja hasta los 5 puntos tras un dos más uno de McGrew, pero un triple en el último segundo de Diogo Brito, devolvía la ventaja a Lleida con 48 a 46.
Con un situación más contenida se iniciaba el tercer cuarto, con ambos equipos reservando fuerzas para el cuarto final, pero afrontando el minuto a minuto con intensidad, igual que en la grada que apretaba como debe ser.
Igualdad máxima en todo momento con cambios de ventaja entre ambos equipos, sin dominio de nadie, y cuarto al que llegaba Zunder Palencia con ventaja por 61 a 63.

Y el apasionante final de partido que se esperaba quedaba condicionado completamente por la expulsión del técnico local, Gerard Encuentra que es como el floping de Natxo Lezkano, la queja habitual de la competición, un hecho tan normal, su expulsión tantas y tantas veces durante estas dos últimas temporadas, que parece mentira que los colegiados caigan en su red y se condicionen de forma tan absurda como reflejo de su bajo nivel de conocimiento del juego y la competición, ya que a partir de ahí, las duras acciones defensivas de los locales frente a las visitantes se vieron con una sola perspectiva; bien hecho por Encuentra que supo leer el bajo nivel arbitral y una lástima para la competición que tolera actitudes como las del entrenador ilerdense.
Pero en fin, el último cuarto tampoco estuvo exento de pasión; hasta el instante de la expulsión del técnico local, Zunder Palencia dio la sensación de ir un paso por delante, de ahí la desesperación de Encuentra, pero Palencia no supo aprovechar el momento, fallaba dos tiros libres del carrusel de técnicas, y un triple de Vucetic tras las situación metía de lleno al equipo y su afición en el partido.
A partir de ahí ceguera en la zona de Lleida en cuanto a faltas, y a pesar que Zunder Palencia luchaba y luchaba, empatando el partido con un triple de Wintering a falta de un minuto, 81 a 81, los locales «aprovechaban» la dinámica, para anotar los últimos 7 puntos, y finalizar el encuentro por 88 a 81.
Lleida supo aprovechar su armamento psicológico de la expulsión de Encuentra para lograr la victoria, y la magnífica presión ambiental de una afición volcada como siempre, y ahora Zunder Palencia, que ofreció un grandísimo nivel, tendrá que seguir esperando al fallo del Andorra de Lezkano.
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