El fin de año suena a gloria con la victoria de Zunder Palencia ante Bilbao Basket

Zunder Palencia 78 – Surne Bilbao Basket 72

Como decía Silvio Rodríguez en una conocida canción suya «el fin de año suena a gloria, enhorabuena y postales» y en el caso de Zunder Palencia, en «sueños de permanencia», y es que el conjunto ahora dirigido por Luis Guil ha conseguido la victoria, la segunda de la temporada y ante un gran rival como el Surne Bilbao Basket, y con una serie de mejoras que han permitido precisamente esta victoria; además que la victoria ha sido presenciada por dos de las figuras históricas de Zunder Palencia, Quique Garrido y el otro eterno capitán de la nave morada, Don Carles Bravo.

Sin el mayor de lo lujos, sin el mejor juego coral del equipo, Luis Guil ha conseguido una mejoría brutal partiendo desde la defensa, con continuas ayudas, y con ataque no solo con mayor velocidad sino con mayor capacidad de sorpresa y de alternativas a las diferentes defensas de los bilbainos con Reyes como palentino y con Sergio, segundo de Ponsarnau que es casi un palentino más en nuestra historia.

Zunder Palencia iniciaba el encuentro con el mejor inicio soñado, el mejor de la campaña, un inicio inmejorable que a pesar de la primera canasta de Smith, muy bien defendido todo el encuentro, de la mano de Benite, con dos cuartos esplendorosos, pero con un primer cuarto por parte de los palentinos que inicialmente gozaban de la perfección con un parcial de 21 a 6 que solo rompía Hilnason desde el tiro libre para finalizar el cuarto con 24 a 12 que era escaso para el mérito palentino.

Toda esa capacidad defensiva para recuperar balones y rebotes, se desvanecía ligeramente en el inicio del segundo cuarto, con un parcial de 0 a 6 que Benite, en una gran noche, cortaba con un triple espectacular.

Ubal tomaba la batuta del segundo cuarto y entre el uruguayo y Franke en los últimos minutos la ventaja palentina se mantenía para llegar al descanso con 42 a 31.

Y en el descanso uno de esos momentos en los que el deporte tiene sentido, la afición palentina inundó literalmente el parque con un espectacular lanzamiento de peluches para que Cruz Roja reparta entre las personas más desfavorecidas, un evento que se repite por segundo año. Grande la afición de Zunder Palencia con su respuesta.

Llegaban los peores minutos tras el descanso, con un Zunder Palencia dormido, sobretedo en ataque lo de Ponsarnau tomaban oxígeno con un Hilnason que con cinco puntos anotaba para ponerse a dos puntos, pero con la manita de Benite, gran día, la ventaja palentina llegaba al 55 a 52 aunque los visitantes ya se habían situado a dos puntos,

Y llegaba el cuarto donde Zunder Palencia ha perdido los encuentros, un cuarto en el que los visitantes se ponían con un punto por debajo (58 a 57) pasado apenas un minuto del cuarto, pero con la mano de Ubal, el más inexperto, con seis puntos prácticamente consecutivos y con cambio anulado por parte de Guil tras un par de pérdidas del uruguayo, Zunder Palencia por fin sabía que tenía en sus manos el encuentro a pesar de la presión de los visitantes.

A partir de ahí, Palencia se manejaba con solvencia, con los bilbaínos incluso a dos puntos, esta semana, con la mano de Guil se manejaba mejor esos últimos minutos donde Zunder Palencia lograba la victoria, más que merecida por 78 a 72

Que la mano de Luis Guil está presente es así, la victoria no es más que el reflejo de los cambios que ya se vieron de la mano de Alberto Padilla ante Baskonia, un equipo más implicado en defensa, pero también un equipo que ataque comienza a sorprender y no ser tan previsible ofensivamene, más rapidez, menos bote de balón, y más alternativas para no facilitar las defensas; el mejor ejemplo, el fracaso de la defensa zonal planteada por Bilbao, o la presión a media pista. Salvada con inteligencia por los palentinos.

Zunder Palencia celebra el fin de año con el mejor regalo posible para los aficionados palentinos, pero sobretodo para sí mismos porque con encuentros así se pueden plantear muchas victorias, las mismas que pueden quedar para la salvación.

Feliz 2024,