Quesos Cerrato Palencia consumó su victoria más inteligente de toda la temporada en el mejor momento, en el primer encuentro de semifinales de los playoffs de ascenso a la ACB ante un Pumarín al que silenció Marc Blanch con una canasta a 3 décimas del final de partido. Meritoria además la victoria con un renqueante Joan Tomás y de algún jugador más, y la ausencia notable también de Mamadou Samb. Unión Financiera Oviedo Baloncesto 74 - Quesos Cerrato Palencia 76. Estadísticas.
Unión Financiera Oviedo Baloncesto 74 – Quesos Cerrato Palencia 76
Quesos Cerrato Palencia consumó una extraordinaria victoria de esas que además le faltaban al conjunto palentino esta temporada, la de los finales apretados que ya le costaron varias a los colegiales, una de ellas precisamente en Pumarín y que hoy Marc Blanch, se encargó de silenciar a 3 décimas del final del partido con una canasta que levantó de sus asientos a todos los aficionados palentinos que lo presenciaron en sus casas, locales o bares y que nos consta fueron muchísimos.
Sin duda la victoria de Quesos Cerrato Palencia ante Oviedo Baloncesto ha sido tal vez la más inteligente de toda la temporada por los condicionantes de los palentinos para el encuentro, con Joan Tomás que tuvo que forzar por la lesión de Mamadou Samb y que no estaba ni al 80 %, y algún jugador más que mostró durante la semana molestias por el esfuerzo de la eliminatoria ante Coruña.
Palencia fue casi siempre a remolque de los ovetenses y desde el inicio Oviedo Baloncesto tomó el mando del electrónico gracias sobretodo al dominio de Dani Pérez y el acierto de los exteriores.
Los palentinos no abusaban del 6’75 y cargaban mucho juego sobre Barnes y Urko, que ante la ausencia de Samb, se volvieron mucho más importantes para los de Sergio García que no forzaron el ritmo en ningún momento para protegerse del cansancio físico.
Al final de los 10 primeros minutos Oviedo dominaba por 4 puntos, 20 a 16, y así seguiría durante los siguientes diez con una ventaja que alcanzaría su máximo mediado el segundo cuarto, 11 puntos (31 a 20), un poco después del tiempo muerto que solicitaba Sergio García.
A partir de ahí Palencia se metía de nuevo en el partido, con los oventenses intentando frenar el ritmo palentino a base de faltas y a pesar de no estar al mejor nivel desde el tiro libre, la diferencia iba menguando hasta situarse a 5 puntos a falta de algo más de minuto y medio para el descanso.
Ambos conjuntos fallaban en sendos ataques y cuando parecía que Oviedo agotaría su posesión y se acabaría el cuarto, fallaba la canasta y en el rebote Dos Anjos cometía una de esas faltas tontas sobre Barnes que este encargaba de anotar para llegar al descanso con 37 a 34 y Palencia metido de lleno en el partido.
Sin embargo tras el paso por vestuarios Oviedo volvía a tirar de acierto exterior para marcharse ligeramente en el marcador tras un gran triple de Dani Pérez, 45 a 36, pero Palencia iba a su ritmo, iba anotando sin forzar la máquina y sin fallar muchos ataques con lo que la diferencia de nuevo y un triple de Joan Tomás, sus tres primeros puntos del partido, empataba el encuentro a 47 a algo más de tres minutos para el final de cuarto.
A los colegiales aun les daría tiempo de ponerse por delante en un 3+1 de Josep Pérez en un contrataque donde el base colegial a falta de 30 segundos del final se arriesgaba y le salía redonda la jugada para situarse por delante, 55 a 56 y diez minutos para seguir soñando.
Oviedo volvía a ponerse pronto por delante pero sin que esta vez los palentinos les dejaran marchar más allá de los 4 puntos, con Oviedo realizando defensas presionantes tras saque de fondo y controlando además el rebote en ambas zonas, los palentinos iban parando cada ataque y a dos minutos del final se iniciaba otro partido tras canasta de Urko que empataba el partido a 71.
Y en esos últimos minutos salía la experiencia palentina, situándose por delante, controlando al milímetro cada segundo de posesión, salvo la última de Oviedo que le servía para empatar el partido a 74 y dejando solo 2 segundos largos para los de Sergio García.
Tras el tiempo muerto del técnico colegial la jugada preparada forzaba un bloqueo ciego para la recepción de Marc blanc que dejaba tirado a su defensor para anotar una gran canasta en suspensión que daba la victoria a Palencia ya que a Oviedo no le daría tiempo a anotar con las 3 décimas que le dejaron.
Palencia se saca la espina del último encuentro en Pumarín devolviendo moneda en el mejor momento, en el primer encuentro de la serie que le permitirá a los colegiales afrontar con mayor seguridad y tranquilidad el encuentro del domingo. Ya lograr una segunda victoria sería extraordinario con los condicionantes con los que llega Palencia en forma de problemas físicos.
Sergio García supo gestionar los cambios y los tiempos de estos en cancha para llegar al final del partido frescos, y sobretodo una última jugada sumamente inteligente sobre Blanch con un bloqueo ciego que interpretó a la perfección el enchufado alero colegial y que daba la victoria a los palentinos. Pero Lamont Barnes y Urko Otegui, fueron los baluartes durante muchos minutos, mucho más mérito al tener la baja de Mamadou Samb.
El domingo a las 18 h. otra cita, pero ya con el 0 a 1 en la eliminatoria Palencia puede jugar con mucha más tranquilidad e intentar aprovechar la presión que le viene encima a Oviedo Baloncesto que está obligado a ganar y esos les puede pesar en exceso.
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